Ayer fue un día muy extraño. Me aburrí de poder dormir por la noche y, por tanto, hacerlo en el día, y por esas cosas de la vida creo que me afectó y mucho. Terminé conversando cosas bastante serias y que en verdad me afectan, cosas para crecer, pero mi lado infantil me tomó y cometí un par de errores, me arrepiento, pero bueno, no hay nada que hacer.
Cada día que pasa aprendo más y me doy cuenta de nuevas cosas, veo que todo aquello que asumimos simple o lo que damos por sentado, no lo es. Siempre hay algo más allá, algo que hay que buscar, que no te lo entregan en bandeja y que, por lo tanto, debes interiorizarlo, de manera que la vida se hace, quizás, un poquito más complicada de lo que uno acostumbra vivirla, pero que se sentirá más completa y mejor aprovechada.
Me he tomado unos días de soledad, todo un "forever alone", tiempo para pensar, alejarme del mundo y entender el mío, desarrollarlo y mejorarlo. No es una tarea fácil, además que no tengo conocimientos sobre meditación o similares, sin embargo lo hago a mi manera y siento que, de cierta manera, resulta, y quizás mejor de lo que podría haber esperado.
El futuro se ve brillante, pero no es tan simple, hay que pulirlo para que permanezca así y aprovecharlo al máximo.
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